sábado, 10 de diciembre de 2011

Día de pesca

Viernes 09/12/11, marchamos a las 11:00 al embalse de la Almendra, un sitio precioso, con una presa grandiosa, unas carpas gigantes y un par de espigones que permiten pescar en todo el centro del embalse. Las condiciones climáticas chungas (una niebla bastante espesa), esta vez no llevamos masa viendo que la última vez los peces no entraban a nada. Nos disponemos a probar primero con gusano vivo (una bolsita con un motón de gusano del Decathon), para mí un poco pequeño, pero bueno. Parece raro, pero las carpas no entran, cambiamos a mosca y tampoco, esto es preocupante. Les tiro pan para a traerlas y resulta que se ni siquiera comen pan, ¿Qué comen estos peces? Seguimos intentándolo todo el rato hasta las 18:00, pero ni con esas. Disfrutamos eso sí, de un gran momento de pesca, y de una fogatita en la que calentamos los bocadillos de chorizo y tortilla francesa que nos hicieron, ¡qué buenos estaban! Calentitos allí al lado de la hoguera se fue la niebla y pudimos ver la belleza del paisaje, y a las bocas de las carpas romper la línea del agua comiendo pequeños mosquitos.

Con la alegría de estar en el campo, volvimos para casa a las 19:00 y para aprovechar los gusanos (que por cierto se habían salido por la bolsa) me fui al río y me puse a pescar hasta las 20:00 y de paso cebaba en un posible sitio para ir otro día. ¡Qué guay pescar de noche, con el cielo empedrado y las pececillos saltando para coger los mosquitos! Tampoco picó ninguno, aunque esta vez sí movieron la veleta, y contento de mi día de pesca (que no es sólo coger peces) me fui a casa para descansar, habiendo aprendido un poquito más.

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